top of page

Gracias al maestro del camino, he despertado del sueño Asuntos y conflictos de pareja.

  • 20 jul 2019
  • 2 Min. de lectura

Actualizado: 23 mar 2021



ree


Somos frecuencia en vibración, partículas expresando la densidad, resonancia pura; si nos escuchamos internamente, todo el tiempo tenemos más conversaciones con uno mismo en vibración, en resonancia, por tanto eres la frecuencia que resuena en pensamientos, en miles de creencias, en billones de programas, puedes resonar amorosamente, armonioso o en vibración distorsionada, difusa, confusa, agresiva, tóxica, victimizante, etc., tu potencial es tan infinito en vibración que tú puedes modificarlo, por tanto eres el responsable de cambiar la música que toca tu interior.


Como vibras es como resuenas y como resuenas es lo que atraes, posiblemente quieras hacer ajustes, resonar y atraer una frecuencia diferente a tu vida personal, y en ese cambio habrá posiblemente dolor distinto a sufrimiento, habrá desapego distinto a control; no temas que resuenes con quien elijes acompañarte a hacer cambios, llámese pareja, novio, amante, amigo, solo es tu vibración espejo, pero no temas, que solo muestra una parte de ti, que te lleva a un aprendizaje de ti mismo, una parte de tus programas; ambos se eligen o repelen para hacer un reajuste en vibración, posiblemente en los cambios internos que tu a lo largo de la vida has solicitado, pueden surgir sentimientos culposos, las sensación de ataque, pero recuerda, nada puede hacerte daño, es un cambio de programas pasados, es la resistencia de permitirte un cambio y será el universo quien equilibre todo, retomando la coherencia y el sentido del para qué has resonado con esta relación, qué te conectó, que estás emitiendo y considerar que cuando elijes vibrar de otro modo, te ayudas y ayudas al otro, tu compañero, al reconocerte a través del otro.


Perdonar sí, porque se ha resonado en el equívoco, perdonar sí, la frecuencia que se ha proyectado, la he proyectado en el otro, es la responsabilidad que asumo al cambio de frecuencia, es el mejor regalo que te das al cambiar los billones de programas en los que te has conectado y actuado, es comprender que el otro con el que he resonado, también ha actuado en resonancia con sus billones de programas.

Tus posibilidades de cambio son tan infinitas, que una vez que comprendes que no hay castigo te darás cuenta que no hay nadie a quien castigar, porque nada te castiga, simplemente habrás despertado del sueño del que te resistías a despertar; al comprender que la pareja del camino fue parte de un despertar, nadie te ha ofendido, sino más que agradecer que ha mostrado una parte de ti y es momento de agradecer el camino aprendido y liberar las ataduras, no hay más que reírse de la vida, cuando comprendo que ha quedado lidiado en mi interior:


"Gracias, gracias, por permitirme mirarme a través de ti, hoy elijo vibrar de otro modo"


Perdóname, lo siento, te amo, gracias por ayudarme a despertar de la proyección del sueño, por fidelidad, por anclaje, por esos billones de programas y creencias en los que resoné, bendigo el camino abundante para mi compañero de vida, maestro del camino, porque me be.


¡Gracias!

 
 
 

Comentarios


bottom of page